OP
Hi, seguí los consejos de la sabiduría ancestral de ioli y me conseguí una libreta para escribir, y resultó resultar (válgame la rebusnancia xD) muy útil.
Éste lo escribí hace unos días, lo revisé unas 5 veces (lo escribí en la libreta 2 veces, lo revisé al pasarlo a la compu, otra revisada en la compu y luego antes de postearlo xD).
Como siempre, leanlo y verán de qué trata:
Las luces del techo pasaban rápidamente sobre mí, ¿o era yo quien pasaba rápidamente bajo ellas?, supongo que lo segundo, ya que lo primero sería ilógico. Oía voces, varias, que me hablaban al parecer a lo lejos. También sentía una mano que sostenía a la mía con fuerza, como si me fuese a ir si me soltaba.
Llegué a oír a una mujer cerca, gritaba cosas entre sollozos, y llegué a distinguir un “quédate con nosotros” de parte de ella. Yo solamente me preguntaba qué había ocurrido, y esa mujer ¿a quién le pedía a gritos que no se fuera?
Entonces recordé lo que había ocurrido, ¿cómo olvidarlo? ¡Por Dios!: Unos cuantos amigos, 5 contándome, estábamos en el automóvil. Solamente íbamos a la playa, no le hacíamos nada a nadie. Quién diría que en unos segundos las cosas se pondrían feas, y todo por un individuo que se metió en sentido contrario; una de dos: o tenía una urgencia o estaba borracho. Uno de mis amigos, el que conducía, trató de esquivar el auto que venía hacia nosotros dando vuelta hacia otro lado, pero terminamos volcándonos.
Terminé inconsciente después de eso, luego desperté fuera del auto, a unos cuantos metros de éste. Noté que el resto habían quedado atrapados en el coche, el cual estaba volteado hacia arriba y casi destruido. Los muchachos estaban muy malheridos e inconscientes (¿o muertos?), algunos colgando por el cinturón de seguridad. La escena me provocaba un nudo en el estómago, y recordé los mails que todo el tiempo me enviaban sobre accidentes automovilísticos, los cuales me desagradaban, así que decidí dejar de mirar.
Dirigí mi vista hacia otro lado y vi a los paramédicos en el lugar. Evaluaban la escena, y atendían a un sujeto a quién le sangraba la nariz; tal vez estoy siendo egoísta, pero sus heridas no se acercaban ni un poco a como yo o mis amigos salimos lastimados.
Vi el automóvil que se nos atravesó estacionado ahí, y así me di cuenta que a quien atendían era el conductor de dicho auto. Sabía que la gente de por aquí, incluyendo a los médicos, les gustaba actuar por conveniencia, pero esto ya es exagerado (ese auto era lindo, nuevo, en cambio el nuestro era un automóvil bastante viejo).
La rabia me invadió en ese momento, pero después fue el dolor de las heridas del choque, era insoportable. Quería gritar, pedir ayuda, pero no tenía las fuerzas suficientes para ello, apenas si podía respirar.
Oí los pasos de alguien acercándose, al parecer un paramédico. –Oye, éste está vivo –dijo. Pensé lo peor, pero alejé cualquier mal pensamiento de mi cabeza.
No sé qué ocurrió después de eso ya que perdí la consciencia. Volví a despertar, pero esta vez dentro de la ambulancia y siendo llevado al hospital. ¿Y mis amigos? ¿Dónde están ellos? No pueden estar muertos, no deben estar muertos, apenas si comenzamos a vivir; esto no es justo.
No creo tener las fuerzas suficientes para continuar despierto. Quiero descansar, pero no por siempre; aún no tengo edad para partir. Me gustaría cumplir el deseo de esa mujer, tal vez es por egoísmo, pero quiero quedarme aquí, en este mundo el cual, digan lo que digan, ahora que lo pienso no es tan malo.
Por ahora solo cerraré mis ojos, con la esperanza de poder volver a abrirlos, si no, por lo menos sabré qué hay más allá de la vida. Si hay un dios, que me bendiga.
Milagrosamente pude subirlo, apenas si tengo tiempo para escribir xDx.
Ahí Nos Vidrios
Éste lo escribí hace unos días, lo revisé unas 5 veces (lo escribí en la libreta 2 veces, lo revisé al pasarlo a la compu, otra revisada en la compu y luego antes de postearlo xD).
Como siempre, leanlo y verán de qué trata:
Las luces del techo pasaban rápidamente sobre mí, ¿o era yo quien pasaba rápidamente bajo ellas?, supongo que lo segundo, ya que lo primero sería ilógico. Oía voces, varias, que me hablaban al parecer a lo lejos. También sentía una mano que sostenía a la mía con fuerza, como si me fuese a ir si me soltaba.
Llegué a oír a una mujer cerca, gritaba cosas entre sollozos, y llegué a distinguir un “quédate con nosotros” de parte de ella. Yo solamente me preguntaba qué había ocurrido, y esa mujer ¿a quién le pedía a gritos que no se fuera?
Entonces recordé lo que había ocurrido, ¿cómo olvidarlo? ¡Por Dios!: Unos cuantos amigos, 5 contándome, estábamos en el automóvil. Solamente íbamos a la playa, no le hacíamos nada a nadie. Quién diría que en unos segundos las cosas se pondrían feas, y todo por un individuo que se metió en sentido contrario; una de dos: o tenía una urgencia o estaba borracho. Uno de mis amigos, el que conducía, trató de esquivar el auto que venía hacia nosotros dando vuelta hacia otro lado, pero terminamos volcándonos.
Terminé inconsciente después de eso, luego desperté fuera del auto, a unos cuantos metros de éste. Noté que el resto habían quedado atrapados en el coche, el cual estaba volteado hacia arriba y casi destruido. Los muchachos estaban muy malheridos e inconscientes (¿o muertos?), algunos colgando por el cinturón de seguridad. La escena me provocaba un nudo en el estómago, y recordé los mails que todo el tiempo me enviaban sobre accidentes automovilísticos, los cuales me desagradaban, así que decidí dejar de mirar.
Dirigí mi vista hacia otro lado y vi a los paramédicos en el lugar. Evaluaban la escena, y atendían a un sujeto a quién le sangraba la nariz; tal vez estoy siendo egoísta, pero sus heridas no se acercaban ni un poco a como yo o mis amigos salimos lastimados.
Vi el automóvil que se nos atravesó estacionado ahí, y así me di cuenta que a quien atendían era el conductor de dicho auto. Sabía que la gente de por aquí, incluyendo a los médicos, les gustaba actuar por conveniencia, pero esto ya es exagerado (ese auto era lindo, nuevo, en cambio el nuestro era un automóvil bastante viejo).
La rabia me invadió en ese momento, pero después fue el dolor de las heridas del choque, era insoportable. Quería gritar, pedir ayuda, pero no tenía las fuerzas suficientes para ello, apenas si podía respirar.
Oí los pasos de alguien acercándose, al parecer un paramédico. –Oye, éste está vivo –dijo. Pensé lo peor, pero alejé cualquier mal pensamiento de mi cabeza.
No sé qué ocurrió después de eso ya que perdí la consciencia. Volví a despertar, pero esta vez dentro de la ambulancia y siendo llevado al hospital. ¿Y mis amigos? ¿Dónde están ellos? No pueden estar muertos, no deben estar muertos, apenas si comenzamos a vivir; esto no es justo.
No creo tener las fuerzas suficientes para continuar despierto. Quiero descansar, pero no por siempre; aún no tengo edad para partir. Me gustaría cumplir el deseo de esa mujer, tal vez es por egoísmo, pero quiero quedarme aquí, en este mundo el cual, digan lo que digan, ahora que lo pienso no es tan malo.
Por ahora solo cerraré mis ojos, con la esperanza de poder volver a abrirlos, si no, por lo menos sabré qué hay más allá de la vida. Si hay un dios, que me bendiga.
Milagrosamente pude subirlo, apenas si tengo tiempo para escribir xDx.
Ahí Nos Vidrios